HOY VIVE DE CRISTO POR MEDIO DE LA BELLEZA

Queremos vivir de Cristo este verano, hoy por medio de sor Inés en la sección: belleza. Feliz día

EN LOOR DE SANTA MARÍA

A lo largo de los siglos se ha ensalzado a la Virgen María;

en el arte y la literatura quedan infinidad de manifestaciones que han brotado del corazón de los hijos, desde los reyes hasta los niños y personas sencillas y anónimas…porque para el corazón humano no hay diferencias ante la Madre. Se han levantado grandes catedrales y basílicas, iglesias, capillas y rinconcitos dedicados a Ella. Se han hecho pinturas magistrales y garabatillos de niño; desde grandes obras literarias hasta esos versos o dichos transmitidos por las abuelas…

Ahí está de fondo la MADRE.
Y ¿quién es el que no ha hecho algo dedicado a la Virgen? El mes de mayo, una flor, un canto, una oración, un guiño, una mirada. Se ha dicho que toda persona para ser completa ha de plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo; sería incompleto si no añadiéramos: hacer algo en honor de su Madre.

Alfonso X el Sabio escribió las Cantigas “en loor de Santa María”. Fue el Infante D, Juan Manuel (su sobrino) quien fundó nuestra comunidad en Cifuentes. Siempre en nuestra Orden se ha tenido una especial veneración y cariño a María.
Hace unos días celebrábamos la Asunción de la Virgen María y yo pude cumplir un sueño que llevaba amasando desde hace 2 años: hacer un pequeño jardín en un rincón de nuestra huerta en honor de Santa Ana donde quería colocar una imagen de la Virgen que tenía que restaurar; al fin era el homenaje cariñoso a la Madre y a la madre de la Madre. A menudo mis sueños se quedan sin cumplir y este parecía que iba a seguir esa suerte, pero ¡¡ya está!! Aunque quedan remates y detalles, lo esencial está. No voy a describirlo (podéis ver las fotos) además esa misma noche lucieron unas lamparitas (que me acababan de regalar) a sus pies haciendo una corona de estrellas.
Ahí queda “EN LOOR DE SANTA MARÍAun nuevo rinconcito escondido en la huerta de este monasterio, donde María derrama bendiciones a sus hijas y a los que sus hijas la presentan. También ahí queda cada noche la constancia del Amor Providente del Hijo Amado que vela nuestros sueños y nuestras ilusiones, todo en la espera de llevar a cabo en nosotros el Triunfo definitivo de la VIDA y del AMOR.